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jueves, 12 de agosto de 2010

Crónica Vitoria-Gasteiz

Viernes 6 de agosto de 2010 a las 19 horas, coche preparado, ruedas a punto... dirección Vitoria-Gasteiz y dispuestos a romper la noche vasca en sus fiestas. Las fiestas de LA BLANCA esperadas por todo el mundo.
Cuatro horas y media después de arrancar el motor llegámos al apartamento alquilado y nuestra cara de sorpresa al verlo fué fantástica, apartamentos Irenaz Vitoria equipados con horno, microondas, lavadora-secadora, vitro, sofá cama, cama dos por dos y una ducha que te quitaba el hipo de golpe, una maravilla para disfrutarla. El dueño nos informó muy bien de las paradas de tranvía y los teléfonos del hospital y taxi, nos entregó una botella de vino de bienvenida y después desapareció ( y no es coña, no lo volvimos a ver en todo el finde )independéncia total !! :)
Una ducha, un poco de cena y a vivir las fiestas de Vitoria !!
Después de coger el tranvía ( he de decir que por tercera vez en mi vida), llegámos a la plaza de la Virgen Blanca dónde se podía sentir, ver y escuchar el ambiente del gentío y sus charangas. Nos reunimos con gente de allí que se disponían a tratarnos como reyes.
Primera parada, en un local que no recuerdo el nombre pero yo solo veía pasar cerveza de mano en mano y yo contentísima ( Me encanta la birra !!). A todo esto tengo que explicar que la temperatura cambia mucho del día a la noche en Vitoria y mi cardigan no me sobraba para nada pero en los garitos podías ir perfectamente en tirantes porque entre el alcohol y el calor podias morir :p
Katxis ( vasos de litro que pueden contener cerveza o Kalimotxo ) que vienen, Katxis que van... Ofertas de Katxis, dos por 8 euros !!! Cañas de cerveza que parecían tubos !!
La gente excelente, la compañía buenísima... te acogen muy bien, son abiertos, habladores, simpáticos pero sobretodo y es lo que mas me gusta a mi, tienen la sonrisa en el rostro siempre, estén cansados o no. Eso te contagia y hace que vivas las festas de LA BLANCA de una manera especial.
Las txosnas ( barrakas o casetas) increíbles, vivímos un ambiente muy personal, muy nuestro, Rafa y yo somos de una filosofía muy peculiar dónde no damos mucha cabida a lo superficial sinó a la causa :)

Al día siguiente RESAKA !!! Nos íbamos de Pintxos pero algunos estómagos estaban aún al revés y a las dos horas regresámos al apartamento para poder descansar.
Nosotros dos cogímos de nuevo el tranvía para comprar recuerdos de Vitoria, he de decir también que no me hablaron en euskera en ningún momento. Eso me gustó pero hay un motivo y lo voy a explicar.

" Yo soy catalana de nacimiénto y vivo en cataluña. He aprendido el catalán desde pequeñita y es una lengua a la que quiero, estoy orgullosa de saber hablar y escribir catalán, a la par que estoy orgullosa de hablar y saber escribir en castellano. Me horroriza ver a niños que ahora solo saben hablar y escribir catalán pero no saben ni hablar castellano. Si antes en los tiempos del caudillo no se podía hablar nada mas que castellano ( me parece horrendo) y ahora en estos tiempos solo se puede aprender y hablar catalan en los colégios... decidme, que cambios en lo que al lenguaje se refiere vamos a disponer para nuestros hijos?
Cada persona debe aprender la lengua de dónde procede, que no se pierdan esas raíces así como sus costumbres. Pero lo que no se puede hacer es imponer una lengua cuando la otra persona ni la entiende. El mejor ejemplo lo tenemos en nuestros padres, recién llegados de Córdoba sin saber nada de catalán´, les imponían en las tiendas el catalán, ( falta de educación increíble) mi madre al final le cogía asco a esa persona porque no entendía nada, ni siquiera se lo expicaban en castellano lo que le decían. Cogerle rabia a una lengua es lo peor que se puede hacer porque ya no la aprendes, ya no la quieres...
En Vitoria yo entendía a la gente, entre ellos hablaban, pero nunca me quedé aislada en una conversación, así es cuando preguntas palabras, frases... y es entonces cuando te interesas por esa lengua. Imponer nunca es la solución a nada."

Cogímos un tranvía equivocado que nos mandó a la otra punta de Vitoria, menos mal que me dí cuenta y con la ayuda de una chica llegámos a nuestra parada habitual. Esa noche fué mas tranquila, nos encontrámos a nuestro TOPO ( es como si fuera nuestro niño xico), vimos a efecto mariposa en concierto, unas cuantas birras y para casa a descansar.
El domingo era nuestro día de vuelta pero lo disfrutamos a tope, comida en las haimas y después unos tés con pastas, no queríamos movernos de allí pero teníamos que volver a Reus... Estirámos las horas al máximo, un helado ( helados vascos por supuesto enormes !!), un café... pero el viaje de vuelta no nos lo quitaba nadie.
Nos despedímos de la gente ( unos amores, los adoptaba a todos!!) y a las 20:30 de la tarde el coche iba de camino a tierras catalanas.
Nos picaron en el camino un montón de mosquitos de estanque pero el silencio era el que presidía esa velada. Las cuatro personas que íbamos en ese coche teníamos la cabeza en Vitoria, en su gente, en sus calles. Habiamos dejado un pedacito de nuestro corazón en esa ciudad, yo porque es la ciudad dónde mi marido pasó su infáncia comiéndo pajitas fritas de GRETEL y me lo pasé de puta madre, mi marido por revivir de nuevo esas fiestas, calles, plazas y su gente.
Se va a convertir en nuestra ciudad de escapada sin duda.

No tengo mucho mas que decir... simplemente ESKERRIK ASKO !!! Volveremos ^^

1 comentario:

  1. Yo hace unos años también estuve en Vitora y también fue una grata experiencia, tengo que reconocer que no me esperaba esa gente tan amable y educada....quizás me imaginaba esa situación que tu has descrito.....en una tienda, en un bar...hablando y sin entender esa conversación... (cosa que me parece una falta de educación muy grave, pero que por desgracia Cataluña seguro que hemos visto alguna vez).....pero es agradable saber que la gente es educada y amable sin importar la procedencia de uno....ojalá muchos aprendieran de todo esto...xD

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